En la cuestión medioambiental, contamos con la certificación ISO 14001 que nos ayuda a identificar, gestionar y mejorar los riesgos que nuestra empresa pueda generar. También nos compromete a cumplir con las legislaciones nacionales, provinciales y municipales.
En base a esto, hemos desarrollado un plan de producción sustentable para optimizar recursos, reducir los desperdicios y tratar la basura generada.
• En el año 2016 en la planta industrial y en oficinas se reemplazó la iluminación tradicional por luces de led, y se concientizó al personal sobre el apagado y encendido de luces, reduciendo notablemente el consumo energético.
• Hemos reducido el uso innecesario de los equipos de aire acondicionado, bajando la temperatura, para evitar el consumo desmesurado en electricidad.
• En el sector de planta se invirtió en la compra de máquinas servomotor, para obtener un consumo de energía reducido. Este está conformado por un motor y un circuito de control. También tiene una potencia proporcional para cargas mecánicas.
• En la planta industrial se creó un Pulmón Verde, un espacio al aire libre que funciona de respiradero natural para el personal y las maquinarias.
• Nuestra empresa no cuenta con Efluentes líquidos. Se utilizan máquinas donde sólo se usa el agua para hidratar piezas, y luego se la reutiliza, generando un residuo líquido 0 (cero), hasta su evaporación.
• Las resmas de papel que empezamos a utilizar desde el año 2016 cumplen con la Certificación ISO 14001, extraídas de bosques plantados y renovables.
• La viruta es biodegradable, lo que significa que su proceso de degradación es más rápido.
• El 80% del material de empaque que se utiliza para Viruta es reciclado. Este material es producido con el descarte del plástico que recubre los packs de gaseosas: al llegar a los supermercados y puntos de venta, los comercios descartan ese material y queda a disposición para ser recolectado y reciclado por la empresa encargada de venderlo posteriormente como materia prima.
• En Tornillos y Tarugos utilizamos packaging realizados en cartulina. Elegimos el material del menor gramaje posible, que permita contener adecuadamente los productos pero utilizando la menor cantidad de papel necesaria.
• Reciclables: Papel y cartón
• Reciclables: Vidrio, plástico, metal.
• No reciclables: Residuos orgánicos, restos de comida, materiales sucios.
• Residuos Especiales: Derivados de hidrocarburos, aceites, pinturas, solventes, combustibles, Etc.
Cada uno de los residuos es enviado a diferentes organizaciones encargadas de su tratamiento y reutilización. Los papeles y cartones son enviados a Fundación Garraham. Esta metodología nos permitió mejorar el orden y la limpieza en máquinas y espacios de trabajo en un 89%.
• Anualmente se realizan en nuestra fábrica mediciones para monitorear las emisiones de gases contaminantes, observándose cada año que la misma no genera un efluente gaseoso.
• Contamos con Residuos Especiales tipo Y8 derivados de aceites vegetales e Y9 que son mezclas y desechos de hidrocarburos, agua y emulsiones, para utilización en el proceso productivo. La recolección de dichos residuos la llevamos a cabo en áreas cubiertas ó semicubiertas, separadas de zonas destinadas a otros usos. Contamos con un sector para acopio final, con bateas antiderrame numeradas y rotuladas para su tratamiento. Realizamos una correcta identificación en función del riesgo que presente.
• Se redujo el uso de solubles (aceites lubricantes) un 46% con respecto a 2016.
• Se redujo el uso de sólidos en un 43% con respecto a 2016.
• En 5 años, logramos disminuir en un 90 % el scrap plástico que se genera en el proceso de inyección. Y un 21% el scrap de alambre (desperdicio generado por la producción de virutas).
• Se colocaron paneles acústicos en oficinas para disminuir el ruido ambiental producido.